¿Por
qué es el sufrimiento de Jesús en la cruz tan vital para mí?
Al acercarnos al final de nuestros
estudios, me gustaría animarle a vivir cer de la cruz. Esto puede parecer
extraño, ya que ahí tuvo lugar una muerte horrible y casi todo el mundo
abandonó a Jesús. Pero, cuánto más cerca estemos de la cruz, más cerca
estaremos de la victoria (1 Corintios 15:54).
En la cruz:
- Jesús fue castigado para que pudiéramos ser perdonados (Isaías 53:4–5).
- Jesús fue herido para que nosotros fuéramos sanados (Isaías 53:4–5).
- Jesús murió para que nosotros recibiéramos una vida nueva (Hebreos 2:9, Romanos 6:4).
- Jesús tomó nuestra pobreza para que tuviéramos abundancia (2 Corintios 8:9).
- Jesús tomó nuestro rechazo para que pudiéramos recibir la aceptación del Padre (Efesios 1:5–6).
- Jesús fue hecho maldición para que pudiéramos obtener la bendición (Gálatas 3:13–14).
Haga una pausa y reflexione en estos
poderosos intercambios y cómo se pueden aplicar a su vida. Por ejemplo, ¿lucha
usted con el rechazo? En la cruz, recibimos la aceptación de Jesús, con todo lo
malo que haya hecho o haga en el futuro.
El apóstol Pablo enfatizó el poder de
la cruz cuando dijo: “Jamás se me ocurra jactarme de otra cosa sino de la cruz
de nuestro Señor Jesucristo” (Gálatas 6:14). En la cruz usted es liberado de
grandes y continuas cargas. Viva cerca de la cruz. Es su camino a la libertad.
Versículo Clave
"Ahora
bien, si hemos muerto con Cristo, confiamos que también viviremos con él"
Romanos
6:8