viernes, 30 de julio de 2010

ESTACIONES DE LA VIDA

¿Cómo alcanzar sabiduría? Nos guste o no debemos tomar conciencia de la fragilidad de la vida. Así nos aconseja el escritor bíblico: "Hazme saber, Jehová mi fin, Y cuánta sea la mediad de mis días; Sepa yo cuan frágil soy." (Job 39:4)

miércoles, 28 de julio de 2010

ÉTICA CRISTIANA

Según una teoría bien conocida y ampliamente aceptada, los paradigmas que controlan el quehacer científico van cambiando a lo largo de los siglos de manera imprevisible. Un hecho fortuito como una guerra o un hallazgo imprevisto, puede llegar a presentar nuevos desafíos y problemas que terminan cambiando el viejo modelo científico por una nueva mentalidad revolucionaria. Ese nuevo paradigma exige pensar otras razones para los mismos fenómenos, que ahora se "ven" desde un marco teórico diferente. De allí se ha deducido erróneamente que el rumbo de la ciencia no está atada a ninguna orientación, ni ideológica ni moral, y que avanza al paso de sus propios problemas.

¿Pero, es tan así? ¿Por qué es la guerra la que sirve de acicate a múltiples descubrimientos científicos y no el hambre de la humanidad? ¿Por qué es que cierta tecnología se desarrolla vertiginosamente mientras que otras, por carecer de competitividad para el mercado, aunque más urgentes, se estancan y mueren? ¿No sería más honesto admitir que la ciencia sí está vinculada a la ambición de poder político y de lucro, y que su rumbo no está dictado simplemente por un dinamismo autónomo?

Por eso es que también me intranquiliza cuando oigo hablar de una ética "profesional" como distinta de una ética "personal". Se piensa, por ejemplo, que la ética biogenética pertenece a un dominio remoto de nuestra moral cotidiana. Que sea remota, sin embargo, no la hace autónoma. Tampoco es autónomo el barrilete distante que flamea en el aire, llevado de un lado a otro por ráfagas de viento. Hay un hilo que baja a tierra, hay una mano que sostiene el hilo. Del mismo modo, ni el azar, ni la necesidad, ni las circunstancias, ni los avances imprevisibles del conocimiento técnico o científico pueden por sí mismos, imprimir un rumbo sostenido a la ciencia. Necesitan de la participación humana. Son las acciones y decisiones personales las que en última instancia orientan corporativamente el rumbo de las cosas.

Por cierto que eso no significa que somos omnipotentes, o que, como en la metáfora del barrilete, no sólo controlamos el hilo sino también el viento o los cambios de temperatura. Significa sí, que tenemos la responsabilidad de comprender los efectos del viento y conocer los movimientos del aire siguiendo la metáfora para adecuarnos a ellos y saber utilizarlos. Si no son procesos totalmente controlables, tampoco debemos aceptar que tengan un dinamismo autónomo. Debieran depender de quienes mejor conocen el tema y de su solvencia moral para tomar decisiones.

Se dice que quienes investigaron la fisión del átomo hasta hacerlo una realidad pavorosa y destructora, no sabían el riesgo que corrían y, que hoy lo lamentan. Pero cabe preguntarse: De haber evaluado los beneficios junto a los efectos negativos de largo alcance ¿hubieran considerado prudente lo que hacían? ¿No es más probable que lo mismo hubiera vendido su alma por un puñado de monedas de prestigio? Cuando alguien defiende obstinadamente una docena de "avances científicos" y niega el saldo de consecuencias adversas que traen, tiene "el entendimiento entenebrecido" o es sencillamente "necio", dos descripciones bíblicas de este tipo de conducta humana.

En el Génesis vemos que Dios invitó al hombre a ejercer la mayordomía responsable de la tierra. Y podemos inferir que, por ser semejante a Él, el hombre debía ser responsable de que lo que teorizara, fabricara, o impulsara, fuera "bueno" y, en lo posible, "bueno en gran manera", como reflejo de su Creador. Fue una invitación a ejercer vocaciones responsables. Vocaciones basadas en la competencia necesaria para juzgar y actuar. Y hoy, podríamos agregar profesiones donde no se manipulen los hilos del barrilete sino que se los dirija para que las cosas sean buenas.

¿QUÉ ES LO BUENO?

Así como intranquiliza la idea de la autonomía de la ciencia, también es cuestionable la creciente distinción entre justicia pública y moral privada. Se entiende la justicia como una virtud social que deriva de la convención que cada cultura elabora, y la moral personal, como limitada al ámbito de la vida privada. Según esto, cada uno tiene derecho a la moral privada mientras no afecte la justicia pública.

Esta dicotomía resulta profundamente perturbadora. Si la justicia es sólo el conjunto de convenciones que ponen límites a la convivencia, y la que regula normas para el ejercicio de la vida pública, bien podría generarse una "justicia" perversa emanada de una mayoría que pensara esa convivencia de forma radicalmente distinta. Hoy creemos que la justicia de la mafia no es verdadera justicia, y que la lealtad entre ladrones no es verdadera lealtad. Pero si la justicia no deriva su contenido sino de convenciones humanas mayoritarias, bien podría llegar el momento en que el contenido de "lo justo" termine cambiando totalmente en nuestra sociedad.

Sin embargo, y pese al relativismo imperante, el reconocimiento de un orden de justicia universal pareciera ineludible. Si lo pensamos un poco, hasta quien sólo respeta el código de honor de la mafia tropieza con situaciones que lo superan. Por ejemplo, si está "bien" matar ¿por qué llora (o se venga) el mafioso si alguien mata a su hijo? Su reacción parece decir que está aprobando con su dolor, aquello que antes descartaba con su moral criminal. La verdadera justicia se le hace patente ante ciertas circunstancias en que quisiera que esa ley moral se cumpliera. Y aunque ayer hacía caso omiso de ella, un golpe de la vida lo sorprende reconociendo "que la ley es buena". Está admitiendo, como decía Pablo en su carta a los Romanos, que lo que él no hace es, sin embargo, lo que debería hacerse.

LA ÉTICA CRISTIANA

Pero la ética cristiana es más que un corolario lógico que nos advierte que la justicia debe ser universal y necesario para ser "justa". El cristiano sabe que hay algo más que lo hace actuar moralmente, y es que reconoce el origen de lo justo en la esencia misma del carácter de Dios. El bien y la justicia están en él. Él es lo justo y lo bueno, y por eso amamos ambas cosas al amarlo a él. La obediencia a las normas se transforma en adhesión a su persona. Llenar de contenido esas palabras significa para nosotros al menos dos cosas.

En primer lugar que debemos observar a Jesús, ya que sólo él pudo decir "el que me ha visto ha visto al Padre". Preguntarnos ¿cuáles fueron sus prioridades? ¿Cómo era su manera de tratar a las personas? ¿Qué hizo para cumplir la ley? Por cierto que no se dedicó a modificar las instituciones de manera tradicional ni utilizando la violencia. Pero su compasión, su indignación, su autoridad moral, y todo lo que dijo sobre lo justo y lo injusto, terminaron cambiando las decisiones personales y comunitarias de quienes se hicieron sus discípulos, hasta conmover los cimientos de la cultura pagana del primer siglo.

En segundo lugar, Jesús es el ejemplo de que la conducta y la moral personal tienen peso social. Si vivo verdaderamente mi fe, entonces mi docencia, mis investigaciones, mis transacciones comerciales, mis proyectos y mi participación social, tendrán "algo" diferente, que quizás no lo note yo mismo, pero sí los demás. Quizás no logremos ser totalmente coherentes, y más de una vez caigamos en claudicaciones, pero si nuestra meta es la obediencia y nuestra intención es honrarlo, "todo nuestro cuerpo tendrá luz": nuestra vida irá en la dirección correcta. Quizás nuestra trayectoria por este mundo sólo represente un milésimo más de sal o un destello fugaz de luz con el que Dios mantiene viva su presencia en medio de la corrupción.

ÉTICA PERSONAL PERO NO PRIVADA

Ser sal y luz: Esto podrá ser así si recordamos que la ética cristiana es personal pero nunca privada. Es personal porque depende de nuestras decisiones; porque depende más de nosotros, que del entorno; porque hemos elegido vivir por el ejemplo de Cristo aun en contra de las costumbres que prevalecen en la sociedad.

Pero eso no significa que la consideremos sólo privada: es pública también. A veces se dice que "la moral privada es cosa de cada uno, siempre que no moleste a los demás". En ese sentido, la ética cristiana podría considerarse como una opción más entre otras, una ética que se prefiere, por ejemplo, a la musulmana. Podríamos guardar celosamente nuestras convicciones como un derecho de conciencia. La esencia del individualismo liberal es precisamente eso: "la inviolabilidad de la conducta privada".

Dice Milan Kundera en El arte de la novela: "…la cultura europea se ve hoy bajo ataque en lo que tiene de más precioso: su respeto por el individuo, por su pensamiento original, y por su derecho a una inviolabilidad de la vida privada".2 Pero la ética cristiana, aunque personal, nunca fue pensada para ser privada, sino pública. Es una ética testimonial que llevó a muchos al martirio. Si la ética depende del carácter de Dios, entonces no puede ser una de muchas opciones éticas sino la base moral universalmente verdadera para todo individuo, en toda cultura, y en todos los tiempos.

¿Cuándo surge esta idea del carácter "privado" de la ética individual? El proceso es largo y complejo. Según muchos analistas, con el surgimiento de las ciudades renacentistas, cuando los hombres experimentaron la posibilidad, negada durante la época feudal, de orientar su propia vida. Como consecuencia, también fue desapareciendo la fe en "la Providencia" (con la que se habían justificado lamentablemente muchas injusticias).

Según este análisis, lo que sucedió fue que la disolución de la idea de una "voluntad divina" comenzó a reflejarse en el hecho de que una pregunta como "¿para qué he sido creado?", dejara de ser una pregunta viva. En lugar de esa preocupación, surgió "el sentimiento de que el hombre es el hacedor de su propio mundo… [Y que] configurar el destino propio significa vivir y actuar con los demás, pero libremente: La medida del éxito y del fracaso está en algún modo en consonancia con las demandas de la sociedad y las posibilidades que brindan los demás. En lugar de la voluntad del señor feudal, o de voluntad divina, la convivencia social se convirtió en la única medida del sistema de valores del individuo".

Pero el concepto de la moral cristiana no surge del contexto de relaciones entre hombre y hombre, sino en las relaciones del hombre con Dios. Obrar bien es obedecer a Dios porque amamos su persona, su carácter. De allí derivamos la naturaleza normativa de nuestra conducta hacia los demás. Obrar mal es alejarnos del carácter de Dios; es pecar, o no dar en el blanco.

De allí entonces, que la ética no pueda dejar de ser, como dijimos, personal y social a la vez: puesto que Dios nos pide compartir su preocupación por los hombres, nuestra ética es social. Y jamás podrá ser privada y no pública, porque Dios nos pide, por amor al mundo, hacer que nuestra pública obediencia a él sea su forma de alcanzarlo.

La ética personal, vivida con integridad y por amor a Dios, es por lo tanto, inescapablemente social y pública.

sábado, 24 de julio de 2010

El Espíritu Santo: Hablar otras lenguas

HABLAR OTRAS LENGUAS

 "Y comenzaron a hablar otras lenguas según el Espíritu Santo les daba que hablasen" (Hch. 2:4). Esta fue la evidencia que vino inmediatamente después de que los discípulos fueron revestidos con el Espíritu Santo. Había 120 personas en el aposento alto, y nos dice claramente la palabra de Dios, que TODOS fueron llenos del Espíritu Santo y que TODOS comenzaron a hablar otras lenguas.

La evidencia clara de que cada discípulo fue lleno del Espíritu Santo en esa ocasión fue cuando demostraron la habilidad sobrenatural para hablar en lenguas que ellos nunca habían estudiado.

ÉL NOS OTORGA PODER PARA EL SERVICIO

  "Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos…" (Hch. 1:8). Jesús usó el término griego dunamis (traducido como poder), del cual derivamos la palabra dínamo. Un dínamo es una máquina que genera un suministro de energía consistente y continua.

Así que el Espíritu Santo dentro de nosotros genera poder que nos capacita para ser testigos para Cristo.

¿POR QUÉ HABLAR OTRAS LENGUAS?

 ¿Cuál es el propósito o beneficio del hablar en un lenguaje que uno no comprende? Las siguiente es una lista breve de algunos del los beneficios de tener comunión con Dios en lenguajes dados por el Espíritu.

   

1 – Es una evidencia bíblica inicial consistente del bautismo en el Espíritu Santo.

   

 "Y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen." (Hch. 2:4). "Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios." (Hch. 10:46). "…vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban." (Hch. 19:6). Dios dice a través de Pablo: "Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas…" (1 Cor. 14:5).

Pablo también dijo: "Doy gracias a Dios que hablo en lenguas más que todos vosotros…" (1 Cor. 14:18).

Note el énfasis íntimo: "Doy gracias a Dios…" El hablar a Dios en lenguaje del Espíritu aumenta y fortalece la conciencia personal de las relaciones y comunión íntima de uno con Dios. Pablo dio gracias a Dios por la habilidad de hablar en lenguas, ya que esto solo puede ser otorgado por Dios, a través de su Espíritu; el PRIVILEGIO de hablar en tales misterios sagrados e íntimos (1 Cor. 14:2); por la DISPONIBILIDAD de esas ricas bendiciones – que en cualquier tiempo, en cualquier lugar, bajo cualquier circunstancia, una persona puede tener una comunión íntima con Dios. Podemos orar, cantar, expresar nuestra gratitud, bendecir a Dios en el Espíritu, etc.… Nuestra mente para este tiempo esta neutral (1 Cor. 14:14); así que debemos sentirnos reposados, refrescados y edificados por este ejercicio espiritual.

2 – Esa es la voluntad de Dios para nosotros.

 Dios dice a través de Pablo: "Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas…" (1 Cor. 14:5).Pablo también dijo: "Doy gracias a Dios que hablo en lenguas mas que todos vosotros…" (1 Cor. 14:18).Note el énfasis íntimo: "Doy gracias a Dios…" El hablar a Dios en lenguaje del Espíritu aumenta y fortalece la conciencia personal de las relaciones y comunión íntima de uno con Dios. Pablo dio gracias a Dios por la habilidad de hablar en lenguas, ya que esto solo puede ser otorgado por Dios, a través de su Espíritu; el PRIVILEGIO de hablar en tales misterios sagrados e íntimos (1 Cor. 14:2); por la DISPONIBILIDAD de esas ricas bendiciones – que en cualquier tiempo, en cualquier lugar, bajo cualquier circunstancia, una persona puede tener una comunión íntima con Dios. Podemos orar, cantar, expresar nuestra gratitud, bendecir a Dios en el Espíritu, etc.… Nuestra mente para este tiempo esta neutral (1 Cor. 14:14); así que debemos sentirnos reposados, refrescados y edificados por este ejercicio espiritual.

3 – Es un medio terapéutico de limpieza y liberación.

En Romanos 8:26, Pablo nos relata respecto a que una de nuestras debilidades humanas es que no siempre sabemos por qué cosas orar como deberíamos.

Algunas veces estamos conscientes de que necesitamos ayuda, pero no entendemos que es lo que realmente está mal y como orar al respecto. No obstante, el Espíritu supera tal insuficiencia por nosotros.

El examina nuestros corazones y descubre exactamente dónde estamos que nos hace falta. El sabe además cual es en la mente del Espíritu – la voluntad de Dios para nosotros.

Luego comienza a ora por nosotros según la voluntad de Dios, llevándonos de esa manera a la armonía con tal voluntad. El hecha fuera todos los consejos, inhibiciones y pensamientos negativos que nos han impedido. El nos induce hacia todo lo que sea positivo y hacia los propósitos buenos de Dios para nuestras vidas.

Esa clave de suplica del Espíritu a nuestro favor es uno de los medios más poderosos que Él usa para la "renovación" del espíritu de nuestra mente.

 

4 – Es un recurso de edificación personal. 

"El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica." (1 Cor. 14:4). Es del término edificar que el vocablo edificio se deriva. Edificar es fortificar, mantener firme o estable.

Cuando hablamos en lenguas, aunque las palabras parezcan un misterio para nuestro intelecto humano, nos estamos edificando a nosotros espiritualmente. Crecemos cada vez más fuertes cuando practicamos este don.

5 – Es una esfera de íntima comunión espiritual con Dios.

   

 "Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios (1 Cor. 14:2).

El propósito principal de este ejercicio espiritual de hablar en lenguas no es que hablemos para los hombres, sino para tener comunión con Dios. Al tener comunión con Dios de esta manera, somos libres de las limitaciones y restricciones de nuestra mente finita. No estamos restringidos a hablar únicamente de las cosas que hemos aprendido por nuestro intelecto.

Somos libertados para hablar también de cosas que somos enseñados intuitivamente por el Espíritu de Dios (1 Cor. Cap. II). Tenemos comunión con Dios acerca de las cosas profundas, cosas que aún siguen siendo misterio para nuestras mentes finitas.

Esta es la profundidad de la comunión de la cual David habló: Un abismo llama a otro… (Sal. 42:7). La profundidad de nuestro ser espiritual tiene comunión con las profundidades del ser de Dios, y viceversa.

6 – Esto nos mantiene conscientes de que el Espíritu Santo mora en nuestro interior.

 Cada vez que hablamos en lenguas, estamos inmediatamente conscientes del movimiento y actividad del Espíritu Santo dentro de nosotros. Nuestra íntima conciencia de la morada del Espíritu dentro de nosotros aumenta a medida que continuamos con Dios en esas palabras que el Espíritu hable a través de nosotros. Somos canales que el Espíritu utiliza para comunicar la adoración y la alabanza al Padre.

7 – Nos permite confiar en Dios más completamente.

Desarrollarse en la vida del Espíritu es un caminar de fe. Cada expresión en lenguas es un acto de fe. A medida que Dios comienza a llevarnos del reino o esfera de la edificación del Cuerpo de Cristo (1 Cor. 14:6), cada nueva fase es un paso nuevo de fe.

8 – Es una liberación de emocional positiva.

El bautismo en el Espíritu Santo no es una experiencia emocional en su origen, sino espiritual. Sin embargo, nuestras emociones responden inevitablemente a esta experiencia y se envuelven en ella. Nuestras emociones son frecuentemente tocadas por el Espíritu, y le conferimos expresión por medio del estímulo del Espíritu. Esto no es algo nocivo o negativo. Por el contrario, es algo saludable y beneficioso.

Demasiados cristianos procuran negar o suprimir completamente sus emociones, como si hubiera algo malo o pecaminoso acerca de la expresión emocional. Pero esto no debe ser así. Somos seres emocionales. Dios fue quien nos creo de esa manera. A fin de que podamos funcionar a plenitud, deberá haber expresión emocional de tiempo en tiempo.

Cuando esta expresión es inducida y animada por el Espíritu dentro de nosotros, podemos estar seguros de que será la expresión emocional más saludable y agradable posible. De seguro que nos limpiará, liberará, fortalecerá y edificará. No sienta temor de ella; confiérale salida libre a tales expresiones. De seguro que estará más saludable y feliz al hacerlo.

 

9 – Es una oportunidad para DAR GRACIAS a Dios aceptablemente.

 ¿Se ha sentido usted incapaz de expresar adecuadamente su gratitud y aprecio a Dios? ¿Parecen sus palabras demasiado débiles para expresar la gratitud que siente en su interior? Entonces he aquí la manera de hacerlo.

Pablo dice que podemos "… bien dar gracias…" (1 Cor. 14:17), por medio de expresar gratitud a Dios por el Espíritu en el lenguaje que El nos dé. Al expresar las gracias de esta manera, usando el don de lenguas, es algo superior a cualquier cosa que nuestra mente humana pudiera pensar o decir. Esto irrumpe a través de nuestras limitaciones, y ministra a Dios en el Espíritu (Jn 4:24).

10 – Esto capacita a uno a orar en el Espíritu.

"¿Qué pues? Oraré con el espíritu pero oraré también con el entendimiento" (1 Cor. 14:15). "Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestras debilidades, pues que hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos" (Rom. 8:26,27).

"Pero vosotros, amados, edificados sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo" (Jud. 20).

11 – Es un recurso de renovación y reposo.

 "Porque en lengua de tartamudos, y en extraña lengua hablará a este pueblo, a los cuales Él dijo: Este es el reposo; dad reposo al cansado; y este es el refrigerio…" (Is. 28:11-12).

El tener comunión con Dios en Lenguas es una experiencia tranquilizadora y refrescante. El cuerpo y la mente pueden reposar completamente. No tenemos que pensar lo que tenemos que decir después ni como decirlo. El Espíritu fluye a través de nuestra comunión perfecta con el Padre, y recibimos el beneficio de esa hermosa comunión. Es un tónico para el espíritu, alma y cuerpo.

12 – Es un ministerio de Alabanza y Adoración.

 "…les oímos hablar en otras lenguas LAS MARAVILLAS DE DIOS" (Hch. 2:11).

"Porque los oían que hablaban en lenguas, Y QUE MAGNIFICABAN A DIOS" (Hch. 10:46).

"Hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en nuestros corazones" (Ef. 5:19).

Muy a menudo cuando hablamos en lenguas, el Espíritu esta adorando, alabando y loando a Dios. El Espíritu está magnificando las obras maravillosas de Dios a través de nosotros. ¡Qué privilegio y gozo que El pueda utilizar nuestros labios para pronunciar loores tan elevados a Dios!

13 – Esto incluye cantar Cánticos en el Espíritu.

 "… cantaré en el espíritu, pero también con el entendimiento." (1 Cor. 14:15).

"… cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones." (Ef. 5:19; Col. 3:16).

14 – Es un medio escritural de mantener la plenitud del Espíritu Santo.

 "… antes bien sed llenos del Espíritu… hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales." (Ef. 5:18,19). El ministrar a Dios en otras lenguas es un medio valido de mantenernos llenos del Espíritu. Por consiguiente, debemos hacer esto diariamente, y muchas veces al día.

15 – Con interpretación es un medio para edificar a otros.

 "Porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación." (1 Cor. 14:5b).

Nuestra lengua personal, devocional o usada para la oración es de edificación para el que la ejercita. Solamente la persona individual es edificada por su uso. No obstante, esa lengua puede ser una bendición para los demás si es interpretada. Así es que el que habla en lenguas debe orar también por si interpretación, a fin de que otros creyentes reciban edificación.

16 – Es una llave para traer la mente de Cristo sobre nuestras mentes.

Santiago enseña que la lengua es el centro de control de un hombre. Es como el timón de un barco, y como el freno en la boca del caballo (Stg. 1:26; 3:1-18).

Cuando ofrecemos nuestro centro de control al Espíritu Santo, El comienza a llevar nuestra conversación y conducta hacia el control de Cristo.

Nuestro sometimiento al Espíritu Santo tocante al don de lenguas es como la liberación de las aguas dulces de la vida, la palabra de Dios. Por medio de usar este don regularmente, encontraremos fuerza para resistir las conversaciones negativas y de crítica – lo que Santiago llama aguas amargas.

Es un medio de producir la mente de Cristo en nosotros, a fin de que podamos hablar únicamente aquellas cosas que sean útiles para nuestra propia edificación y para de quienes nos oyen.

viernes, 23 de julio de 2010

APOCALIPSIS: LAS SEIS PRIMERAS TROMPETAS

LAS SEIS PRIMERAS TROMPETAS – (CAPS. 8 y 9).

Como vemos aquí las SIETE TROMPETAS son el SEPTIMO SELLO, cuando el séptimo sello se abrió, hubo "silencio en el cielo como por media hora." Como el telón que se baja para preparar a los espectadores para algo portentoso. Luego de este misterioso silencio, comenzarán a sonar las trompetas en una progresión ordenada hasta su total consumación (11:14-15).

Las cuatro primeras trompetas (8:7-12). Parecen estar relacionadas con los "cuatro vientos" de la "ira del Cordero" (en 6:16 – 7:3), y que habían sido detenidos mientras se sellaba a los 144.000 que pasarían por la gran tribulación. Al sonido de cada trompeta se nos describe estas calamidades:

1- Granizo, fuego y sangre sobre la tierra.

2- Un monte ardiendo echado al mar.

3- Una estrella candente cae sobre los ríos.

4- Son heridos el sol, la luna y las estrellas.

Los vrs. 7 al 12, cada uno en su segunda parte nos ilustran, su alcance desbastador, con la frase que afectaba a "La tercera parte de…"

El vr.13, siguiendo con el gran protagonismo angélico, tenemos los tres áyes, o clamores por la suerte futura de los habitantes de la tierra ante los próximos e inminentes desastres.

La quinta trompeta (Cap. 9: 1-11).

Tenemos aquí la descripción de una terrible invasión de demonios, salidos del abismo, en forma de langostas infernales. Su trabajo es atormentar a los hombres que no están marcados con el sello del señor, pero sin llegar a quitarles la vida. En la zona de Palestina estas plagas de langostas son frecuentes y conocidas. Las mismas provienen de la parte oriental del Mar Muerto y avanzan dejando desoladas las tierras.

Sin duda que en la mente de Juan están presentes las referencias de las plagas de langostas que Dios envió sobre Egipto (Ex 10:12-19), y también la que describe el profeta Joel. Notemos que este ejército de langostas sube del abismo, que aquí es considerado como la morada de los demonios. En esta concepción la tierra está comunicada con este abismo por medio de un pozo muy profundo, que permanece cerrado, y cuya llave la tiene el mismo Dios, con el fin de limitar la actividad diabólica sobre el planeta.

Siguiendo con la descripción de este capítulo tan terrorífico, dice en el vr.1, que Juan ve una estrella caer del cielo sobre la tierra, a la cuál fue dada la llave del pozo del abismo. La estrella representa un ángel y esto es debido a que en la literatura apocalíptica los ángeles eran quienes dirigían las estrellas y eran también la personificación de las mismas.

Para los judíos estos seres semi -divinos por su desobediencia, podían convertirse en demoníacos y malos, hostiles y dañinos a Dios y a los hombres. Algunos estudiosos creen que aquí se refiere al ángel que guardaba el abismo. Y que no sería extraño que aludiese a Uriel, que según el libro apócrifo de Enoc, tenía autoridad sobre el mundo y el abismo. Esto solo como un comentario informativo.

El abismo en el apocalipsis describe el lugar donde se castiga hasta el día del juicio final a los ángeles caídos, los demonios, la bestia y el falso profeta de Satanás (9:1-2; 11:7; 20:1-3). El lugar del castigo definitivo será el "lago de fuego." (20:10, 14,15).

Quizás sea importante detenernos, pues este concepto del abismo fue sufriendo una evolución con el correr de los siglos. En el principio, por ejemplo, era el lugar donde estaban aprisionadas las aguas. En la creación se nos describe que las aguas rodean la tierra, (Gén.1:6-7), y Dios las separa creando en medio de ellas el firmamento. Así, el abismo es el lugar donde las aguas que podrían invadir la tierra, son contenidas por el poder de Dios, formando una especie de gran mar subterráneo.

Posteriormente, el abismo se nos presenta como la figura donde moran los enemigos de Dios, (Am.9:3; Is.51:9; Sal.74:13), algo así como una prisión subterránea. (Is.24:21,22). La cita anterior también nos ayuda a concebir el abismo como una gran grieta de la tierra solida, dónde se nos dice que las huestes celestiales desobedientes y los reyes de la tierra son hechos prisioneros.

Como ya citáramos la descripción más detallada del abismo la encontramos en el libro de Enoc, que influyó mucho en el pensamiento teológico del período entre los dos testamentos. Allí se nos dice que el abismo era la prisión de los ángeles caídos, los ángeles que vinieron a la tierra y sedujeron a mujeres mortales, los ángeles que enseñaron a los hombres a practicar adoración a ídolos y demonios en lugar de Dios, (Gén.6:1-4). Allí se lo describe de manera desoladora. Carecía de firmamento y de suelo. No tenia agua ni aves; desolado y estéril, el confín mismo de la tierra y el cielo, (Enoc.18:12-16). Era un lugar caótico. Había en él fuego que quemaba echando llamas, y un acantilado, cuya profundidad era mayor que cualquier capacidad humana de medirlo, (Enoc 21:1-10).

Todos estos elementos son para ayudarnos a entender que lo que está viendo Juan, es que en ese terrible tiempo de devastación, los terrores no serán naturales ni de este mundo. Sino que son de origen demoníaco, vienen del abismo, donde han sido aprisionados los ángeles caídos, las estrellas malditas y los espíritus del mal. Las peores y más horribles criaturas del universo gozarán, durante un tiempo, de su última oportunidad para llevar a cabo su terrible y espantosa tarea. Como nunca el mal y sus agentes cubrirán la redondez de la tierra.

Las llaves del pozo del abismo: dice (vr.1), que le fueron dadas a "…la estrella que caía del cielo." Cristo mismo le hace entrega de las llaves lo que está de acuerdo con Ap.1:18, donde dice que Jesucristo tiene las "Llaves de la muerte y del infierno." Aquí se resalta que el poder y la providencia de Dios es total y también controla los abismos y los poderes del mal. A pesar de todo el movimiento y despliegue del mal, que a través de distintas figuras, a veces terroríficas, Juan nos describe la absoluta omnipotencia de Dios y el Señorío de Jesucristo SOBRE TODAS LAS COSAS, es cuidadosamente realzada por Juan a través de todo el relato.

Cuando el ángel abrió el pozo (vr.2), para soltar la quinta calamidad sale una densa humareda, semejante -nos dice- al humo de un gran horno que oscureció el sol y el aire. Y de en medio de la humareda comenzaron a Salir fantasmagóricas langostas que se posaban sobre la tierra (Vr.3). No está hablando aquí de langostas, naturalmente, sino solo usando esta figura para tratar de describir a monstruos apocalípticos compuestos de varios elementos destructivos en sumo grado.

Veamos en los Vrs. 7 y 8, sus características, donde el autor describe estos monstruos como semejantes a caballos, preparados para la guerra que tenían rostros de hombres, cabellos de mujer, dientes de león y cola de escorpión. Esta terrible descripción está basada en pasajes bíblicos y también en tradiciones extra-bíblicas, como ya vimos. Así que notemos que "Los diversos elementos constitutivos de estas langostas infernales sirven para simbolizar el gran poder que tenían para hacer daño. Poseían la rapidez del caballo, la sagacidad del hombre, el atractivo de la mujer, la fuerza del león, la voracidad de la langosta y el veneno del escorpión. Difícilmente el autor sagrado podría imaginar otro ser más dañino y aterrador que el que aquí nos presenta."

Notable es ver también que a estos seres tan maléficos se les prohíbe dañar los cultivos del hombre, es decir, la hierba verde de la tierra, la verdura y los árboles.

Tan sólo se les permite atormentar a los hombres que no están marcados con el sello de Dios sobre sus frentes (Vrs. 4).

Lo terrible de este juicio es que se les ordena a estos monstruos-langostas no matar a los hombres, sino atormentarlos durante cinco meses. Esto a través de la picadura de un escorpión que a la vez que dolorosísima raramente es mortal. Estos cinco meses representan la duración de la vida de una langosta, o sea un verano entero. El tormento causado por estas langostas-escorpiones por medio de su picadura es tan doloroso que las victimas desearán y buscarán la muerte, pero no la hallarán, porque la muerte huirá de ellos (Vrs. 6). Otra vez se nos presenta la muerte personificada, huyendo de los hombres, "para hacerlos sufrir más, y así obligarlos a volver en sí, reconocer su pecado y convertirse."

De acuerdo con los comentaristas ya desde los tiempos, "las langostas son un símbolo de los tormentos espirituales provocados por los demonios en las conciencias de los hombres. Los malos espíritus atacarían a éstos con turbaciones de espíritu y remordimientos de conciencia tan fuertes que les harían desear la muerte y llamarla a gritos, aunque en vano. "El rey de estas langostas infernales es "el ángel del abismo", en hebreo Abaddon y en griego Apolyon (Ver .11). Este primer término significa "destrucción" ó "perdición", y suele ser empleado en la Biblia como paralelo de Seol que es sinónimo de región de los muertos (Job 26:6; Prov. 15:11; 27:20; 30:15). Es por lo tanto una personificación de los poderes de la muerte, como el Hades en Apocalipsis 1:18.

El autor traduce Abaddon en griego por Apolyon, que también significa, DESTRUCTOR. Lo que tal vez tenga relación con Apolo que con su arco y sus flechas causaba estragos, como las langostas con él aguijón venenoso semejante al de los escorpiones.

EL EJERCITO INFERNAL EXTERMINA LA TERCERA PARTE DE LOS HOMBRES – (9:13-21).

Vr.13: La voz que sale del altar parece personificar las oraciones de los santos allí ofrecidos.

Vr.14: La voz ordena que sean soltados los cuatro ángeles que estaban atados sobre el rio Éufrates. Históricamente en la literatura bíblica el Éufrates es el punto de partida de las grandes hordas invasoras. Durante siglos primero fueron los Asirios, después los babilonios, escitas y en tiempos de San Juan los partos.

Estos cuatro ángeles atados a orillas del Éufrates no debemos confundirlos con los de (Apoc. 7: 1-3.) Aquí parecen representar más bien las hordas invasoras que sembrarían por doquier la devastación y la ruina.

Los cuatro ángeles que estaban preparados por Dios para el momento preciso -para la hora, para el día, para el mes y para el año- señalado por su justicia, fueron sueltos (Vr.15). Su misión ya no es solo atormentar sino matar a la tercera parte de los hombres. El ejército que acompaña a los cuatro ángeles es una caballería infernal compuesta de 200 millones de caballos y sus Jinetes (Vr.16). Un número que indica la imposibilidad de contar las huestes del terror.

Aparentan estar armados con el fuego mismo porque el color de sus yelmos es como el rojo de un horno encendido, azul como el humo que se eleva desde un incendio y amarillo como el azufre que se quema eternamente en el abismo infernal. Los caballos tienen cabezas como de leones y colas como de serpientes; su respiración arroja fuego, humo y azufre. Para aumentar la destrucción, sus colas-serpientes muerden y envenenan. La consecuencia es que un tercio de la raza humana muere.

¿Cuál es el propósito?, que el resto los hombres recapacitara. Pero no ocurre así. Los hombres siguen adorando sus ídolos y los demonios que habitan en ellos y siguen en sus caminos de maldad. Y esto nos muestra la increíble dureza del corazón del hombre, al punto que la rebeldía produce una vida totalmente oprimida por fuerzas del mal. Aún cuando los hombres se creen sabios, toda su sabiduría es la muestra de su necedad. Basta mirar a nuestro alrededor la corrupción moral de nuestro mundo, como también lo afirma San Pablo (Rom. 1:28-32).

QUE DIOS GUARDE NUESTROS CORAZONES DE ADORAR CUALQUIER FORMA DE IDOLOS QUE NO SON EL VERDADERO DIOS VIVIENTE.

domingo, 18 de julio de 2010

HISTORIA…

La bioética como una disciplina determinada y concreta es nueva, tiene pocas décadas de vida. Es tan joven que los diccionarios no registran su nombre todavía.

Es la sucesora de la siempre vigente Deontología (del griego: "deber y tratado"). Tratado de los deberes, de la ética profesional y de la moral médica.

Sin embargo, sus orígenes son antiguos y lejanos; hunden sus raíces en lo más profundo de la Historia de la Medicina.

La Historia de la Medicina es la crónica de una larga lucha contra la enfermedad. Lucha singular; la del hombre a favor del hombre. Pero en esta lucha desigual, siempre, inexorablemente, triunfa la muerte. Por eso lo he repetido muchas veces, esta lucha debe entenderse como la lucha no en contra de la muerte en sí misma, sino de la lucha contra "la muerte a destiempo".

La muerte a destiempo, por la falta de medios para evitarla o, debido a la impericia o a la negligencia del médico que la provoca.

Esto último constituye la Yatrogenia (del griego Yátrico: relativo a los médicos y génesis, comienzo o generación). De aquí que, el término yatrogenia signifique mal generado por los médicos o efectos nocivos a causa de su actuación. Todo lo opuesto a la sabia sentencia: "primo non nocere": primero no dañar.

Los griegos fueron los inventores de la filosofía, porque fueron los descubridores de la razón como instrumento de conocimiento especulativo y racional. Y como muchos de los primeros filósofos fueron también médicos Pitágoras, Alcmeon y Empédocles, entre otros pronto le aplicaron a la medicina estos modos de conocimiento y nace la medicina racional, en contra de la medicina mágica y teúrgica.

En esta época irrepetible en la historia de la humanidad alrededor de 400 años a.C. aparece Hipócrates (etimológicamente: "domador de caballos"), que no sólo crea la medicina racional, sino que sienta las bases de la ética médica, contenida en sus escritos y resumida en su célebre Juramento.

Al estudiar las obras de Hipócrates no puede dejarse de notar, ante todo, el alto nivel de su conducta moral, su afán de considerar por encima a otras circunstancias el bien del paciente y su confianza en el poder curativo de la naturaleza: "Vis medicatrix naturae".

"Nuestras naturalezas –decían- son los médicos de nuestras enfermedades". "No debemos entrometernos con el proceso de curación" y sin embargo ayudaba con sabios consejos, empleaba tratamientos racionales y prescribía dietas y modos de vida adecuados. De aquí deriva su importante norma general de que todo tratamiento terapéutico debe tender a favorecer y a reforzar el auxilio que a sí mismo da su propia naturaleza y, sobre todo, a evitar que se interfiera a ésta en su camino.

Pero lo encantador de los escritos hipocráticos, lo que realmente cautiva y seduce es que sus observaciones del enfermo disfrutan siempre de primacía sobre las puras teorías.

Toda la filosofía y el pensamiento médico de Hipócrates y su elevado sentido ético están contenidos y resumidos en su conocida frase: "ser útil o, por lo menos, no perjudicar"; frase sentenciosa que tuvo después gran difusión bajo la forma de locución latina: "primo non nócere". Este concepto fundamental e insoslayable de la bioética lo encontramos en su libro primero de las epidemias (Epidemia: etimológicamente, "sobre el pueblo").

Siglos después, con el advenimiento del cristianismo, se inicia la verdadera medicina asistencial; la misión del médico se humaniza, y es cuando toma conciencia de que puede curar a veces, aliviar a menudo, consolar siempre.

Dado el ámbito para el cual escribo este artículo la revista Compromiso Cristiano de la Fundación Escuela Bíblica Evangélica, en su número dedicado a la Bioética creo necesario hacer hincapié en ocasionales aspectos de la relación Medicina Religión.

En este aspecto, no se puede ni se debe confundir bioética con religión.

La Iglesia de occidente muchas veces puso trabas que constituyeron un verdadero atraso en la marcha de la medicina.

Cuando comenzó a practicarse la cirugía, allá por la Edad Media, a causa de la fuerte oposición de la Iglesia esta quedó relegada al olvido y practicada por los cirujanos de "Toga corta": barberos y sacamuelas sin instrucción, enemigos de los cirujanos de "Toga larga", miembros del Colegio de San Cosme.

El argumento de la Iglesia corroborado en 1215 por la famosa ordenanza del papa Inocencio III era: "Eclesia abhorret a sanguine": la Iglesia aborrece el derramamiento de sangre.

El español Miguel Servet, con sus investigaciones describió la circulación pulmonar, o lo que se llama circulación menor. En el año 1553 tuvo la desdichada idea de publicar su descubrimiento como cosa secundaria en una obra teológica titulada: "Restitutio Christianismi" en donde criticaba la doctrina de la Trinidad; por esta causa fue declarado hereje. Se salvó de la inquisición española que lo condenó en efigie. Huyó a Ginebra donde cayó en manos de Calvino y fue quemado vivo junto con un ejemplar de su obra.

Pasó mucho tiempo antes de que a Miguel de Servet se le otorgara su merecido puesto en la historia de la Medicina. La razón de este atraso fue la intolerancia religiosa que, aparte de su muerte en la hoguera, destruyó todos los ejemplares de su libro.

Más tarde ya no en la Edad Media el inicio de las transfusiones de sangre, recibió también por parte de la Iglesia amargos y severos ataques. Esta objeción, tal vez se fundaba en una errónea interpretación del precepto mosaico, del libro de Levítico, que en el capítulo 17, versículo 14, dice: "El alma de toda carne, su vida está en la sangre", debido a un desconocimiento de la antropología del antiguo pueblo hebreo.

Algo parecido ocurrió en nuestros días, hace apenas unos treinta años, cuando en diciembre de 1967, Christian Barnard, en la Ciudad del Cabo, efectuó el primer trasplante de corazón entre seres humanos. Los reparos se debieron, quizás, por aquello del corazón es el centro de los sentimientos y de las emociones, lo que quedó definitivamente desvirtuado, ya que los cardio trasplantados tienen el tremendo y raro privilegio de poder contemplar a su viejo y cansado corazón descansando dentro de un frasco, mientras ellos siguen viviendo y amando, con un corazón ajeno en el pecho. Siguen amando, con un nuevo corazón, con el mismo amor, las mismas cosas de antes.

Pero más incomprensible que la oposición a los avances de la medicina que trabajaba afanosamente para lograr nuevas esperanzas de vida, fue el beneplácito a prácticas aberrantes de la medicina en complicidad con el arte y con la Iglesia.

Este capítulo oscuro, este fenómeno artificioso y cruel, fue el de los "Castrati". Tuvo distintos objetivos: por un lado, obtener las grandes voces de oro para la música lírica del Barroco y, por el otro, conseguir sopranos para integrar los coros de la Iglesia. Estaba prohibida la presencia de mujeres en estos coros y no se encontró mejor medida para solucionar la necesidad de voces agudas y poderosas que la castración de niños. Era más ético y menos pecado castrar a niñitos inocentes, que permitir a las mujeres cantar en las iglesias.

Con la castración antes de la pubertad, se impedía la secreción de la testosterona, la hormona masculina que marca los caracteres sexuales. Quedaba así bloqueado el cambio de la laringe para adoptar progresivamente una voz más grave conservándose los agudos. Y, a la vez, la potencia toráxica proporcionaba a esta voz infantil una enorme potencia y un timbre muy particular.

La práctica de la castración para el cuidado de los harenes y también para el canto procedía de Oriente. Pero, curiosamente, fue en la Italia de la Europa del siglo XVIII y en la capilla vaticana, donde a partir del siglo XVII aparecieron escuelas encargadas de formar castrados sopranitas.

Los primeros castrados fueron utilizados en la Capilla Sixtina del Vaticano en 1562.

Pesaba como ley divina para las mujeres la prohibición de cantar en los coros de las iglesias y, como los niños mantenían una tonalidad adecuada para las alabanzas a Dios, solamente durante tres o cuatro años (desde los siete a los once, a lo sumo).

El Papa Clemente VIII fue quien visualizó la solución: castrar niños y luego educarlos en conservatorios conventuales.

En verdaderas factorías de eunucos cantores, la mayoría de los niñitos morían desangrados o consumidos por fiebres o infecciones. Los que sobrevivían y lograban el milagro vocal en la práctica, los virtuosos eran excepcionales pasaban a formar parte de los "coros angelicales".

"Cantaban como los ángeles y como ellos, no tenían sexo", alguien los definió. (1) Tal vez el recuerdo de este desgraciado y nefasto connubio entre la medicina, la religión y el arte, contribuyó al nacimiento de la Bioética que surgió en los E.E.U.U. durante los años setenta. Sin embargo, sus orígenes se encuentran en las doctrinas hipocráticas y en los principios éticos y morales de la deontología médica.

Siendo la medicina una disciplina científica especializada tan particular y, con un objetivo tan bien definido como es el acto de curar, suele hacernos pensar que puede mantenerse y desarrollarse al margen del pensamiento de cada época.

Y sin embargo, a poco que andemos y estudiemos la evolución de la Historia de la Medicina, se comprueba que guarda y avanza en estrecha relación con las distintas manifestaciones de la cultura, de la filosofía y, en especial, de la antropología filosófica de cada época histórica. Es decir, hay una estrecha relación del pensamiento médico con la filosofía del hombre a través de toda su evolución.

La ciencia en general y la medicina en particular, por su especial significación, se desarrollan bajo la influencia de la filosofía. Y así como cada época tiene su filosofía, cada filosofía tiene su propia medicina.

Según cual sea el enfoque de la filosofía y la comprensión que la antropología filosófica haga del hombre, así será también, consecuentemente, la visión que la medicina tenga de ese hombre. Porque toda medicina en el transcurso de su historia, como todo médico en el ejercicio de su profesión, tiene que orientarse según una determinada imagen del hombre y andar su camino con la mirada vuelta a esa imagen última del hombre, que de alguna manera vive en su interior.

Sin embargo los problemas éticos y las decisiones del médico son tan complejos que ni la medicina ni la filosofía por sí solas pueden dar respuestas a los problemas bioéticos. Éstos requieren el aporte de la psicología, la sociología, la teología y el derecho y, sobre todo, de la antropología en toda su significación.

La bioética abarca toda la existencia del hombre; va desde la inseminación artificial y la manipulación genética en los comienzos de la vida, hasta los trasplantes y la supervivencia dependiente en el final.

"Los descubrimientos científicos no son, éticamente, ni buenos ni malos: son la respuesta a una necesidad cultural y humana de avanzar en el saber. Sin embargo, la interpretación que la sociedad hace de ellos no es imparcial y se basa, principalmente, en el uso que se dará a ese nuevo conocimiento". (Débora Frid)

Termino con las palabras que, escribió hace ya años antes que se institucionalizara la bioética mi recordado amigo, el doctor Jorge Orgaz, médico humanista que fue Rector de la Universidad Nacional de Córdoba: "La ética está por encima del saber y éste supeditado a ella. Medicina sin ética no es medicina sino ciencia o saber libresco, mera amenaza del hombre y su vida".Nota del director:

-El doctor Luis A. Seggiaro es Académico Emérito de la Academia de Ciencias Médicas de Córdoba.

-Ex profesor de Historia de la Medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Córdoba.

-Ha sido Presidente de la Asociación Argentina de Historia de la Ciencia.

-Es autor y coautor de diversos libros de Historia de la Medicina publicados por la Editorial Universitaria de Buenos Aires y la Editorial de la Universidad de Córdoba.

-Es miembro Titular de la Societé Internationale D'Histoire de la Médicine. Capítulo Argentino y Miembro Correspondiente de la Sociedad Mexicana de Historia y Filosofía de la Medicina, como asimismo de diversas sociedades científicas de nuestro país.

-Ha publicado artículos de su especialidad en revistas científicas nacionales y de Europa y dictado numerosas conferencias sobre Historia de la Medicina, entre otras actividades.

sábado, 17 de julio de 2010

EL LLAMADO

¡SE HA HECHO EL LLAMADO!
¡Un llamado para que la esposa le adore ha salido del Trono de Dios! Dios está levantando una esposa adoradora. Una esposa que no sólo le ofrece alabanza de labios sino que le da alabanza de corazón. Una esposa que desea perderse en su amor por Su presencia. Esta adoración trae vida al cuerpo de Cristo. Restaura el gozo a Su pueblo. Restaura nuestra amor hacia el Padre. Trae liberación y libertad.

Las banderas, las cintas, los panderos etc. son cada uno de ellos, adornos físicos que simbolizan lo espiritual. Nuestro propósito al utilizarlos es ministrar al Señor. Se utilizan como instrumentos de alabanza, adoración, guerra espiritual e intercesión.

Muchas personas consideran estos instrumentos como una nueva manera de adoración pero en realidad sólo son nuevas para nosotros. Estas maneras de adorar a Dios se mencionan a través de todo el Antiguo Testamento y acaban de ser re-descubiertas. Dios está restaurándolas para su esposa. Isaías 61:10 habla de la esposa adornándose de joyas. Estos son adornos para que la esposa utilice.

Estos instrumentos son solamente simbólicos pero nosotros podemos sostenerlos en nuestras manos y físicamente levantarlos para expresar nuestro amor y gratitud a Cristo, nuestro Salvador.

Cuando Jesús entró en Jerusalén, la gente levantó ramas de las palmeras para saludar a Jesús como expresión de su amor, de victoria y de libertad.

Hoy día flameamos nuestras banderas y agitamos nuestros panderos como expresión de nuestro amor, de victoria y de libertad. Estamos flameando nuestras "ramas" simbólicas para darle la bienvenida a nuestro Rey que regresa pronto.

Esto es adoración visual. No hacen falta las palabras para entender esta adoración. Son símbolos que trascienden los idiomas y las barreras raciales. Las personas de diferentes idiomas y trasfondos culturales entienden que estás alabando al Señor. El Espíritu Santo puede usar estas expresiones visuales para alcanzar y penetrar un corazón endurecido.

De la manera que formas más tradicionales de alabanza y adoración preparan el ambiente y tocan el corazón para recibir la Palabra de Dios, así también esta forma de adoración es ungida y logra lo mismo.

Esta adoración visual es una forma de comunicación. Usamos estos instrumentos de alabanza para proclamar quién es Dios para nosotros. Al utilizarlos y levantarlos se puede representar un nombre, un tipo de carácter o un atributo de Dios. Y no sólo nos estamos comunicando con Dios sino también a los que están a nuestro alrededor.

Se ha hecho el llamado. Ahora necesitamos preguntarnos – ¿aceptaremos el llamado o nos resistiremos? Resistir es no hacer nada. Es el camino fácil – y el camino utilizado por la mayoría.

Una y otra vez oramos y pedimos que Dios nos use pero no queremos obedecerle cuando El desea obrar a través de nosotros. Suspiramos y decimos: "Oh, Señor, no puedo hacer eso". Dios conoce nuestros puntos fuertes y nuestras debilidades. También sabe lo que podemos llegar a hacer con la ayuda del Espíritu Santo. Recuerda, Él no nos usará en cosas mayores si nunca le obedecemos en lo pequeño.

martes, 13 de julio de 2010

COMO ENCONTRAR A DIOS

Primera epístola a Timoteo

CAPITULO II

2. Cristo, el único mediador. v.5, 6.

Aquí llegamos a lo que es en la doctrina de Pablo una verdad fundamental. Recordarán ustedes que en (1: 1) habló de "Dios nuestro Salvador". Ahora emplea la elocuente fórmula "porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre." Así que en esta expresión esta nuevamente afirmando la divinidad exclusiva de Jesucristo como único mediador en la obra redentora.

Este hilo de pensamiento es el mismo que usa el escritor de Hebreos en textos como (7:22; 8:6; 9:15; 12:24) y que es importante tener en cuenta en medio de una sociedad que busca llegar a Dios por tantos y diversos caminos equivocados.

Pablo es categórico reiterando que sólo hay un mediador: Jesucristo, aparte de El ningún otro hombre, no importa cuán preparado pueda estar, que sea gurú, maestro, filósofo etc. Tampoco cuán místico o esotérico parezca, ningún hombre carismático, ni líder pudo morir en la cruz por el pecado del hombre. Sólo Jesús puede decir: "Yo soy el camino, la verdad y la vida, nadie viene al Padre sino por mí" (Jn.14:6)

Esta es una verdad fundamental, el cristianismo es Cristo céntrico. El mensaje del evangelio es una persona muriendo en la cruz por nuestros pecados. Si al mensaje del cristianismo, le quitamos la persona de cristo, sólo nos queda una máscara religiosa hueca y vacía sin vida ni esperanza.

Toda enseñanza cristiana debe tener como eje principal la persona gloriosa de Cristo. Él debe ser el punto de partida para toda doctrina y también para dilucidar cualquier duda. Como lo resume Pablo: "Nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo."

El v. 6 utiliza la palabra "rescate" y la utiliza' como sinónimo de REDENCION en cuya palabra la idea principal es "soltar" ó "liberar". El pecado mantiene al hombre en servidumbre; la redención lo libera de esa esclavitud.

Cristo, verdadero Dios y verdadero hombre, se dio a sí mismo como rescate por todos. El mismo habló de "dar su vida en rescate por muchos" (Mt.20:28) lo que afirma (Pablo aquí en el 2: 6.) Todo esto debido a que la Biblia afirma que todos los hombres están esclavizados por el pecado y son "hijos de ira" (Ef.2:1-3; II Ti.2:26). La redención es la obra más excelsa y maravillosa que haya tenido lugar en este mundo. Y la humanidad la necesita desesperadamente. Jesús tomó nuestro lugar en la cruz, para brindarnos una redención que es ETERNA (Heb.4:2)

3. Pablo, apóstol de los gentiles v.7.

El énfasis que pone Pablo a su llamado con estas palabras muestra qué importante era en su pensamiento el oficio al que había sido llamado, el cual además, abarcaba tres campos de acción: predicador, apóstol y maestro.

Cuando Dios llama a una persona le da abundante gracia como para desarrollar varias capacidades para que de esa manera el cuerpo de Cristo pueda ser bien ministrado.

Por ello toda persona que sirve en el Reino de Dios de corazón, debe tratar de mejorar cada día. Si es posible: multiplicar sus dones. Así Dios se glorificará. Hay una cosa que debes evitar y esa es: conformarte. La vida cristiana no se vive de los "laureles del pasado" sino de las "nuevas conquistas del presente."

¿Hay en tu vida nuevos planes? ¿Nuevos sueños? ¿Deseas algo mejor para tu vida? Entonces, no te quedes quieto. No te duermas. ¡Haz algo! Lo que sea pero hazlo. No te quedes parado. No te quedes dormido. Sacude tus dones. Dale valor a tus capacidades. Dios está contigo. "Si Dios es por nosotros, ¿quién será en contra?" (Ro.8:3l.)

El problema en estos días en la Iglesia es que hay muchos espectadores. Miles se quedan en las tribunas mientras sólo once juegan el partido contra el diablo. ¿Qué estás haciendo sentado? Dios busca hombres como Pablo. Hombres que aunque equivocados dan lo mejor de su vida y de su esfuerzo a la causa que abrazaron.

4. El deseo más ardiente de Pablo. v.8.

En primer lugar dice "que los hombres oren". Allí está el secreto: nadie puede logra nada de valor eterno para Dios si no ha transitado por el camino de la oración.

Esta debe ser la meta del trabajo de cada uno de nosotros: lograr ver que los hombres aprendan a orar. A veces nos preocupamos por hacer buenos negocios en la vida. Pero ¿qué mejor negocio que enseñarle a una persona a orar? Nos hemos preguntado ¿cuánto puede lograr en este mundo una persona de rodillas?

Pablo se lo imaginaba. Él tenía una visión clara. Por eso decía "que oren en todo lugar", él se imaginaba cristianos orando en el mercado, en las calles, en el ejército, en el campo labrando la tierra etc. Y ¿qué veía? Una red mundial espiritualmente Poderosa. Una red que no permitía a los demonios intervenir en este mundo.

La iglesia debe enseñar a cada cristiano a orar eficazmente, porque cuando cada cristiano está orando en su lugar de trabajo y en donde se encuentre, esa iglesia estará cubriendo con poder espiritual al barrio donde Dios la ha puesto. Y desde allí impactara a su ciudad. Lo ángeles van a trabajar sin impedimentos y los vecinos van a comenzar a llegar a montones para oír la Palabra de Dios. Así que no debemos olvidarnos tú y yo que tenemos una prioridad: enseñar a los hombres que oren en todo lugar.

Pero no es solamente eso, va más allá: "levantando manos santas, sin ira ni contiendas." ¿Lo entiendes a esto? No es el hecho físico de levantar las manos lo que hará eficaz a la oración. No, no. Si fuera así, ¿por qué no Podría Dios obrar igualmente cuando tenemos las manos en los bolsillos? ¿Acaso no es soberano?

Lo que tenemos que ver aquí es la MOTIVACION de nuestro corazón cuando levantamos nuestras manos. Tú puedes levantar las manos pero los ojos de Dios atraviesan las manos y llegan hasta el corazón. ¿Y qué encuentra Dios allí? Tal vez encuentre rabia contenida, enojo, resentimiento. ¿Cuántos años has convivido con esos sentimientos que te han ido amargando y que están volviendo tu vida seca y sin sentido?

No Podemos dejar de detenernos aquí; la importancia del estado de nuestro corazón es realmente crucial si queremos que nuestras oraciones sean eficaces.

Noten como dice la Versión Popular:"… que eleven sus manos a Dios con pureza de corazón y sin enojos ni discusiones". Hay personas que han vivido por años con rencores ocultos. La Biblia llama a eso "raíz de amargura" y ustedes saben cómo trabaja una raíz: cada vez penetra más profundamente. Aún grandes edificios han sido destruidos por un raíz que al principio parecía inofensiva pero que con el correr de los años llegó destruir los cimientos.

Si hay algo dañino para nuestra vida eso es el resentimiento. Todo resentimiento tiene nombre y apellido. Sin embargo no hay raíz emocional por más profunda que sea que Dios no pueda quitar. Dios hace nuevas todas las cosas. Yo te invito a detenernos, a repasar nuestra vida y quitar de raíz el enojo, el resentimiento y también toda angustia, fruto de discusiones con las personas que amamos. A ellas es a quienes más herimos y nos hieren.

Cierra tus ojos. Piensa en las personas que te han dañado. En quien te haya hecho sentir degradado, o tal vez usado. Quizás hay más de una persona que tienes que perdonar. Sé valiente, en tu corazón no debe quedar la menor partícula de odio ni resentimiento, debes quedar limpio por la sangre de Jesucristo. Vamos a hacer una oración juntos. El Padre amoroso quiere sanarte para que tus manos se levanten en señal de victoria.

"Padre amoroso, te doy gracias porque me elegiste a mí para ser un intercesor Poderoso en este mundo. Deseo levantar mis manos con pureza de corazón cada vez que eleve mis oraciones. Por eso en el nombre de Jesús, decido firmemente perdonar a las personas que me han maltratado, herido y humillado. En tu nombre Jesús yo perdono a (mencione el o los nombres) y renuncio a toda ligadura emocional con él/ella/ellos y me declaro libre espiritual y emocionalmente de toda contaminación de odio, enojo, resentimiento y angustia a causa de discusiones pasadas. Me declaro cubierto por la sangre preciosa de Jesús. Soy perdonado, soy sanado. Soy libre y vencedor. ¡Gracias Jesús! En tu Nombre. Amén."

Creo que ahora serás un intercesor victorioso. ¿Verdad? Oro para que tu vida sea poderosamente visitada por Dios.

lunes, 12 de julio de 2010

QUE HACER CUANDO NECESITES PACIENCIA

Por eso, no dejen de confiar en Dios, porque sólo así recibirán

Un gran premio. Sean fuertes, y por ningún motivo dejen de

Confiar cuando estén sufriendo, para que así puedan hacer lo

Que Dios quiere y reciba lo que él les ha prometido. Pues

Dios dice en la Biblia: "Muy pronto llegará el que tiene que venir. ¡Ya no tarda! Hebreos 10:35-37 (Biblia en Lenguaje Sencillo)

Los Sufrimientos Y Nuestra Confianza En Dios

1 ¡Todas esas personas están a nuestro alrededor como testigos! Por eso, en los años que nos quedan de vida debemos dejar de pecar, y dejar también de lado lo que nos estorba para vivir confiando totalmente en Dios. Porque la vida es como una carrera, y el pecado es como un estorbo que se nos enreda en los pies y no nos deja correr. Hebreos 12:1 (Biblia en Lenguaje Sencillo)

8 Vale más el fin de algo que su principio. Vale más la paciencia que la arrogancia. 9 No te dejes llevar por el enojo que sólo abriga el corazón del necio. Eclesiastés 7:8-9 (Nueva Versión Internacional)

Todo lo que está escrito en la Biblia es para enseñarnos. Lo que ella nos dice nos ayuda a tener ánimo y paciencia, y nos da seguridad en lo que hemos creído. Aunque, en realidad, es Dios quien nos da paciencia y nos anima. A él le pido que los ayude a ustedes a llevarse bien con todos, siguiendo el ejemplo de Jesucristo.

viernes, 9 de julio de 2010

EL ESPÍRITU SANTO

LA LLAVE HACIA LA VERDADERA PLENITUD

¿Quién es el Espíritu Santo? El Espíritu Santo es probablemente el miembro menos conocido de la Santa Trinidad. Es lamentable decir que hay una falta de conocimiento acerca de Él, aún dentro de la iglesia misma. Si no le conocemos, ¿cómo vamos a experimentar los beneficios sobrenaturales que la Biblia afirma, él tiene para los hijos de Dios? Hay varias razones firmes del porqué esto no debería ser así:

1- El Espíritu Santo es Dios.

Como el tercer miembro de la Trinidad, Él es co-igual con Dios el Padre y Dios el Hijo. Es apropiado, por consiguiente, que se le atribuya la misma reverencia, respeto y honor a El que a las demás deidades. Nunca debemos tratarlo como una deidad inferior. Debemos conocer tanto como nos sea posible de El cómo conocemos acerca de los otros dos miembros de la Divina Trinidad. El Espíritu Santo no solo es una persona; Él es un SER DIVINO. (Juan 1:1). Él es DIOS.

2- El Espíritu Santo es una persona.

Muchos cristianos parecen sentir que el Espíritu Santo es meramente un poder o influencia impersonal. Ellos tratan al Espíritu Santo como si Él fuera "electricidad" o alguna otra forma de poder que pudieran encender o apagar a discreción. Este concepto está muy lejos de la verdad. Él es una persona que posee gran autoridad y poder, pero es mucho más que el poder que posee. Es eminentemente digno del respeto y honor que nos reservamos para el Dios Todopoderoso.

A) El posee las características básicas de la Personalidad.

"Pero cuando venga el Espíritu de verdad, Él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo que oyere, y os hará saber las cosas que abran de venir. El me glorificará." (Jn. 16:13,14).

  1. Intelecto: La habilidad para pensar y razonar.
  2. Sensibilidad: La habilidad para sentir las cosas.
  3. Voluntad: La capacidad de escoger y decidir.

B) Expresiones de su poder.

Un mero poder o influencia no serían capaces de sentir aquellas cosas que la Biblia afirma que El Espíritu Santo siente y experimenta. Por ejemplo, somos exhortados a no contristar el Espíritu Santo (Ef. 4:30).

Ananías y Safira mintieron contra el Espíritu Santo (Hecho. 5:3,4).

Sabemos que un poder no puede ser contristado. Usted no puede contristar la electricidad. Tampoco puede mentirle, ni tentarla. Un poder impersonal es incapaz de tales sentimientos. Pero una persona puede ser contristada, ofendida, molestada, tentada o se le puede mentir. Note algunas expresiones de personalidad atribuidas al Espíritu Santo:

– Puede sentir: Ef. 4:30

– Puede consolar: Hecho. 9:31

– Puede pensar: ROM. 8:26

– Puede hablar: Hecho. 13:2

– Puede orar: ROM. 8:26

– Puede enseñar: Jn. 14:26

– Puede expresar su voluntad: 1 Cori. 12:11

– Puede prohibir: Hecho. 16:6

– Puede obrar milagros: Hecho. 19:6

C- Él no es un poder impersonal.

Una de las razones por las cuales muchos se refieren a Él simplemente como un mero poder o fuerza es debido aciertos nombres que se le atribuyen en las escrituras para describir su ministerio. A veces es llamado viento, lluvia, aceite, fuego, etc… pero todos ellos, son símbolos o nombres de varios ministerios que el ejecuta; sin embargo, Él mismo como Dios es mucho más grande que esos ministerios a través de los cuales opera y se manifiesta.

3- Esta es la época del Espíritu Santo.

Él es el otro Consolador, quien ha tomado el lugar de Jesús (Jn. 14:16). Este período de la historia es el TIEMPO DE LA LLUVIA TARDIA (Zc. 10:1). O el tiempo de la actividad más grande del Espíritu Santo que la iglesia jamás haya conocido. Por consiguiente, necesitamos saber tanto como nos sea posible acerca de su persona. Pues él vive en nosotros. Somos su templo. Y los vasos de barro a través de los cuales manifestará su gracia y poder a nosotros y a los que nos rodean. Es entonces, asunto de vital importancia el conocerle como persona. Amarle. Desearle. Anhelarle con todo nuestro corazón.

LA IMPORTANCIA DEL BAUTISMO DEL ESPÍRITU SANTO

Esta es una frase algo controversial la cual tiene respaldo bíblico firme. Esta aparece cuatro veces en los evangelios y dos veces en el libro de los Hechos (Mt. 3:11; Mr. 1:8; Lc. 3:16; Jn 1:33; Hecho. 1:5; y 11:16).

Bautizar significa sumergir completamente, o "sumergir dentro de". Esta tiene un significado aún más profundo, que es sumergir dentro de un elemento que tiene el poder para cambiar aquello que envuelve o cubre. Un buen ejemplo de esto es cuando se toma una indumentaria y se le cambia de color; tal vestidura o ropa se sumerge dentro de un elemento que transforma radicalmente la vestidura.

El ser bautizado en el Espíritu, es ser sumergido, metido, sepultado, rodeado completamente por, envuelto totalmente por el Espíritu santo.

Ahora bien, ¿Cuál será la evidencia inicial de que nosotros hayamos recibido la plenitud del Espíritu Santo?

jueves, 8 de julio de 2010

EL PREDICADOR Y SU DISCIPLINA PERSONAL

Hay temas que son como las columnas en las cuales descansa el carácter de todo lo que será nuestra vida. Muchos estarán pensando: pero, ¿por qué no hablamos de cómo predicar? Sin embargo, les recuerdo que nuestro énfasis principal, es en lo concerniente a la personalidad del predicador. Ni el bosquejo, ni la técnica oratoria que utilicemos podrán suplir la falta de integridad en cualquier aspecto de la vida del predicador.

No me imagino como alguien que no aprendió disciplina podrá arengar a su congregación a que ordene su vida según el Reino de Dios.

"Las palabras discípulo y disciplina tienen la misma raíz. Un líder es una persona que primero se ha sometido voluntariamente y ha aprendido a obedecer una disciplina que proviene de fuera de si mismo, pero que entonces, se impone una disciplina aún más rigurosa desde dentro de él. Los que se rebelan contra la autoridad y desprecian la auto-disciplina pocas veces califican para los cargos importantes del liderazgo. (Entre ellos predicadores y maestros). Eluden los rigores y sacrificios que exige la disciplina divina. Muchos que han dejado la obra misionera lo han hecho no porque no tienen dones suficientes, sino porque hay muchas partes de su vida que no han sido puestas bajo el control del Espíritu Santo."

Muchos creen erróneamente que porque hacen cursos y seminarios de liderazgo ya están habilitados para el ministerio. Pues están equivocados, ¡por millones de kilómetros!

El que no ha aprendido a obedecer, a estar sumiso a las autoridades de la iglesia jamás debe permitírsele tocar las cosas santas del ministerio.

La desobediencia viene del mismo infierno. Es el mismo espíritu del diablo y aunque se disfrace de religiosidad, eso no es mérito para dejar que personas de ese tipo contaminen los utensilios del santuario. Como el sacerdote en la antigüedad llevaba escrito a la vista de todos "Santidad a Jehová", así también, la vida de una persona debe mostrar claramente su espíritu de obediencia, porque santidad y obediencia van tomadas de la mano.

Muchos cristianos "desordenados" de hoy andan con la cara larga, según ellos porque se sienten "ofendidos". Aducen: es que en mi iglesia el pastor no comparte el ministerio – cuando en verdad lo que quieren decir es: "Yo no sé por qué no me deja lucir mis grandes capacidades de predicar. ¡Oh, si yo predicara! Qué distinto sería la unción de las reuniones… "No dudes de que sería tan distinto que a la segunda semana le predicaría a la sillas…!

Algunos son como los niños que juegan a la guerra en la calle, cuando uno pasó y los vio tan quietos y sentados les preguntó qué les pasaba. Uno de ellos le respondió: "Es que todos somos generales y no encontramos ninguno que quiera jugar de soldado."

Mis queridos hermanos, es demasiada profunda la obra que Dios deberá hacer en nuestro carácter y en nuestro corazón, antes que podamos estar capacitados siquiera para participar de soldados en el ejército del Señor.

Nada es superficial en el Reino de Dios. Nada puede tomarse a la ligera. No es sólo pararse a dar un discurso. Es predicar para determinar el destino eterno de las almas. ¿Crees que se puede hacer esta tarea como cualquier charlatán de feria? No sería esto más bien vergonzoso para el evangelio y para el mismo Maestro de quien se dijo: "¡Nunca nadie nos ha hablado como este hombre!"

¿Avergonzaremos el nombre de nuestro Maestro por nuestra indisciplina y falta de dedicación a las cosas sagradas?

Dios nos dé un santo temor cada vez que por la misericordia de Dios, nos sea dado ponernos de pie con el sagrado libro en nuestras manos.

Y ¿qué decir de los jóvenes que piensan que con mucha prontitud pueden ocupar un lugar en el servicio de nuestro Rey? ¿Estarías dispuesto a Someter tu carne y tus pasiones a la disciplina de la Palabra de Dios y del Espíritu Santo? ¿Qué precio estás dispuesto a pagar para servir a Jesús?

A un gran estadista que en una oportunidad hizo un discurso que cambió el rumbo político de su nación, le preguntaron ¿cuánto tiempo tardó en preparar su discurso? Él le respondió a su admirador: "Toda mi vida ha sido una preparación para lo que he dicho hoy."

Como dice J.O. Sanders: "Un joven con posibilidades de liderazgo trabajará cuando otros pierden el tiempo, estudiará cuando otros duermen, orará cuando otros juegan. No habrá lugar para hábitos descuidados y malogrados, ni en palabra, ni en pensamiento, ni en obra, ni en vestido. Observara una disciplina igual a la de un soldado en cuanto a régimen y comportamiento, para que pueda sostener una buena lucha. Él se encargará del trabajo ingrato que los demás eluden. Emprenderá la responsabilidad oculta que otros evitan porque no les dará el aplauso de los demás, ni gana con ella ningún aprecio.

El líder controlado por el Espíritu Santo no eludirá el enfrentarse a situaciones o personas difíciles y cogerá la ortiga cuando sea necesario. Con amabilidad y valor hará una crítica cuando sea necesaria o administrará la disciplina cuando así lo exige la obra del Señor. No aplazará el escribir una carta difícil.

Su papelera no esconderá las evidencias de su falta de coraje para enfrentarse con los problemas urgentes. Su oración será: Dios enduréceme para no obedecer a mis deseos, Los deseos del cobarde con voz patética, quien implora por la comodidad, el descanso y el gozo. Yo mismo, soy el traidor más grande de mi persona, Mi amigo más falso, Mi enemigo mortal, Mi obstáculo, en cualquier camino en que yo vaya.

¿Qué les parece? ¿Demasiado duro? Veamos entonces, otro ejemplo.

Cuando el Dr. Thomas Cochrane, el fundador de World Dominion Movement, fue entrevistado como aspirante para la obra misionera, se le preguntó: "¿A qué sitio en el campo misionero crees estar llamado?" contestó: "Sólo sé que deseo que me ofrezcáis el sitio más difícil." La respuesta de un hombre fuertemente auto disciplinado.

¿Sabes lo bueno de tener un Dios amoroso? Él siempre está con nosotros! No importa dónde estemos, no importa cómo estemos, no importa quiénes seamos: Él está a nuestro lado.

Jesús dijo: "he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo" (Mateo 28:20)

Cada día de tu vida debes vivir con la certeza de que Dios está a tu lado haciéndote compañía. Él no sólo nos enseña el camino a seguir, sino que siempre camina a nuestro lado.

Y si el camino se te hace difícil, recuerda que "el diablo le puso a Jesús las mismas trampas que nos pone a nosotros para hacernos pecar, sólo que Jesús nunca pecó. Por eso, él puede entender que nos resulta difícil obedecer a Dios. Así que, cuando tengamos alguna necesidad, acerquémonos con confianza al trono de Dios. Él nos ayudará, porque es bueno y nos ama". (Hebreos 4:15-16)(Biblia en Lenguaje Sencillo)

"Nuestro Dios es como un castillo que nos brinda protección. Dios siempre nos ayuda cuando estamos en problemas". Salmos 46:1 (BLS)

"Bueno es el Señor; es refugio en el día de la angustia, y protector de los que en él confían". Nahúm 1:7 (NVI)

El Salmista miraba lo que tenía alrededor, veía su situación y le cuestionaba al Señor, pero también él mismo se contestaba, porque sabía que su ayuda estaba en Dios:

"A las montañas levanto mis ojos; ¿de dónde ha de venir mi ayuda? Mi ayuda proviene del Señor, creador del cielo y de la tierra". Salmos 121:1-2 (NVI)

"No temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios.

Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa". Isaías 41:10 (NVI)

LA NASA Y DIOS ¡!!

El Programa Espacial Está Encontrando Respuestas A Sus Dudas En La Biblia

Mientras que ciertas novelas y algunos canales de televisión por cable, por oscuras razones que van más allá del sensacionalismo, están gastando millones de dólares haciendo publicaciones y reportajes donde desacreditan de manera aparentemente científica y convincente a la Biblia, la NASA ha encontrado que "El Libro de Libros" no es tan solo un libro lleno de inspiradoras alegorías judías...

Es un relato del Sr. Harold Hill, presidente de "Maquinaria Curtis" de Baltimore, Maryland, consultor de la NASA.

  • La NASA desarrolló un programa computarizado para saber la posición del sol, la luna y los planetas en el espacio en cualquier momento del futuro, para evitar que éstos cuerpos espaciales estén en la trayectoria de nuestras naves espaciales y satélites artificiales, y colisionen contra ellos.
  • Programaron la computadora para hacer el cálculo hacia delante y atrás en el tiempo, pero en un momento dado el programa se detuvo, dando una alerta de un grave error en el cómputo del tiempo.
  • Al revisar el programa, encontraron que la alarma se refería a la falta de un día en el espacio del tiempo que ya ha transcurrido en la tierra.
  • Estaban perplejos, pues no tenían ninguna respuesta a ese problema.
  • Un miembro del equipo mencionó que cuando era niño, en la escuela Bíblica le enseñaron que una vez el sol se detuvo, porque Josué le pidió a DIOS poder continuar una difícil batalla y así pudo ganarla. Le dijeron: "Muéstranos".
  • Buscaron y hallaron Josué 10:12-13 "Y el sol se detuvo y la luna se paró...El sol se paró en medio del cielo, y no se apresuró a ponerse casi un día entero"
  • ¡Allí estaba el día que faltaba!
  • Verificaron el dato en la computadora, introduciendo los sucesos del libro bíblico de Josué.
  • Coincidiendo con la afirmación de la Biblia de que no fue un día entero, el sistema calculó que la pausa del tiempo era de 23 horas con 20 minutos. ¿Y los otros 40 minutos?
  • El mismo miembro del equipo recordó que en alguna parte de la Biblia decía que el sol había hecho su recorrido al revés...
  • Los científicos pensaron que eso ya era una locura, pero fueron al Segundo Libro de Reyes, Capítulo 20, donde se relata lo siguiente: que el Rey Ezequías, fue visitado en su lecho de muerte por el profeta Isaías, quien le dijo que no se angustiara, porque aún no iba a morir. Ezequías le pidió una señal de prueba. Isaías le dijo: "¿Quieres que la sombra del reloj de Acaz avance diez grados o que retroceda diez grados?"
  • Ezequías contestó "Fácil es que la sombra decline diez grados, pero no que la sombra retroceda diez grados". Entonces el profeta Isaías clamó al SEÑOR y DIOS hizo retroceder la sombra los diez grados que había recorrido en el reloj de Acaz...
  • ¡Diez grados del reloj de Acaz son exactamente los 40 minutos que faltaban en el cálculo de la computadora, y completan el día perdido del Universo!

CONCLUSIÓN

  • La religión es algo privado de cada quien, pero si cree usted que DIOS no es un ser mitológico, y usted es Cristiano católico o protestante, eso implica que: Nuestro DIOS está vivo, que visitó éste mundo como JESUCRISTO Nuestro Salvador, que hoy manifiesta su presencia en Su ESPÍRITU SANTO, y que está aún haciendo maravillas en el Universo.
  • Unos aficionados que creyeron en el SEÑOR, construyeron un Arca y la llenaron de miles de animales, y no se hundió...
  • En cambio, unos profesionales que creyeron únicamente en la ciencia, hicieron el Titanic... lo demás es historia.

LA ALEGRIA DE UNA VIDA SENCILLA

En una socie d ad ha m bri e nt a d e p os ee r co sa s, h oy y si e m p re – n o es fá c i l p ara e l crist i ano “est a r cont e...