miércoles, 5 de noviembre de 2014

Como Orar en Espíritu y en Verdad

"Más la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos Adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; Porque también el Padre tales adoradores busca que le Adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, En espíritu y en verdad es necesario que adoren"

(Juan 4:23, 24).

 

Estas palabras de Jesús a la mujer de Samaria, constituyen el registro de su primera enseñanza en Cuanto al tema de la oración. El Padre "busca" adoradores. Nuestra adoración satisface su afectuoso Corazón y es un gozo para Él. El busca verdaderos adoradores, pero encuentra a muchos que no han Pasado por esa escuela. La verdadera adoración es aquella que es realizada en espíritu y en verdad. El Hijo ha venido para Abrir el camino a esta adoración en espíritu y en verdad, y nos la enseña. Y una de nuestras primeras Lecciones en la escuela de oración debe ser entender lo que es orar en espíritu y en verdad y saber También cómo lograrlo. A la mujer de Samaria, nuestro Señor le habló de tres formas de adoración. Primero está, la adoración Ignorante de los Samaritanos: "Vosotros adoráis lo que no conocéis". La segunda, es la adoración Inteligente de los judíos al tener el verdadero conocimiento de Dios. "Nosotros adoramos lo que Conocemos, porque la salvación viene de los judíos". Y luego, la nueva, la adoración espiritual Que Él mismo ha venido a presentar: "Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos

Adoradores adorarán al Padre en Espíritu y en verdad".

De la conexión es evidente que las palabras "en espíritu y en verdad", no significan, como suele pensarse, Seriamente, de corazón, en sinceridad. Los Samaritanos tenían los cinco libros de Moisés y algún Conocimiento de Dios; indudablemente había más de uno entre ellos que con honestidad y seriedad Buscaban a Dios en oración. Los judíos tenían la verdadera y completa revelación de Dios en su Palabra, dada hasta ese momento; Entre ellos había hombres piadosos quienes invocaban a Dios con todo su corazón. Pero todavía no "en Espíritu y en verdad", en el verdadero significado de las palabras, lo que Jesús dice, "La hora viene, y Ahora es", es que solo en y por medio de Él, la adoración a Dios será en espíritu y en verdad. Entre los cristianos, todavía podemos encontrar estas tres clases de adoradores. Algunos, quienes en su Ignorancia, difícilmente saben lo que piden: Ellos oran con seriedad, e incluso reciben, pero muy poco. Hay otros, quienes tienen un conocimiento más correcto, que tratan de orar con todo su corazón y con Toda su mente, y a menudo oran más seriamente, pero todavía no alcanzan la plena bienaventuranza de La adoración en espíritu y en verdad.

Es dentro de esta tercera clase de oración que debemos pedir a nuestro Señor Jesús que nos

Tome; debemos ser enseñados por Él, debemos aprender de Él a adorar en espíritu y en

Verdad. Solo esto es adoración espiritual, esto nos hace adoradores tales como el Padre

Busca.

En la oración, todo dependerá de nuestra correcta comprensión y de la práctica de la adoración en

Espíritu y en verdad.

jueves, 9 de octubre de 2014

¨ Diez Cosas Que los Cristianos no Harán¨




Por Mike Gendron
1 . Los cristianos no se jactan en su religión ya que la cambiaron para una relación eterna con Cristo ( Heb. 13:5 ) .
2 . Los cristianos no recibirán el Cristo Eucarístico porque recibimos el verdadero Cristo en la conversión y ahora vivimos en unión permanente con Él ( Rom. 6:5 ) .
3 . Los cristianos no se confiesan ante un sacerdote terrenal , porque tenemos un perfecto Sumo Sacerdote en el cielo (Hebreos 4:14-15 ) .
4 . Los cristianos no se someten al Papa como cabeza de la iglesia, porque Jesús es nuestra Cabeza ( Ef. 5:23).
5 . Los cristianos no siguen las tradiciones no bíblicas de los hombres , porque tenemos una palabra más segura ( 2 Timoteo 3:16-17 ; 2 Pedro 1:19).
6 . Los cristianos no ganarán indulgencias para la remisión de los pecados porque Jesús pagó la deuda eterna del pecado con Su sacrificio perfecto y suficiente ( Heb. 7:27; 9:12).
7 . Los cristianos no participarán la continua expiación del Cristo Eucarístico en un altar porque Jesús terminó la obra de nuestra redención (Juan 19:30).
8 . Los cristianos no rezan a María y los santos , porque Jesús es el único mediador de Dios y Él nos ha dado acceso a El ( 1 Tim 2:5; Heb 4:16).
9 . Los cristianos no van a tener unidad con los católicos romanos porque hemos sido santificados por la verdad y no estaremos en yugo desigual con los incrédulos ( 2 Corintios 6:14-18 ; Juan 17:3 ) .
10 . Los cristianos no se inclinarán ante estatuas católicas, iconos y la Eucaristía porque es pecado de idolatría ( 1 Cor . 10:14).

EL AMOR según la Biblia

El verdadero amor no consiste en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo para que nosotros fuéramos perdonados por medio de su sacrificio. 11 Hijos míos, si Dios nos ha amado así, nosotros también debemos amarnos los unos a los otros.12 Nadie ha visto nunca a Dios, pero si nos amamos unos a otros, Dios vive en nosotros y también su amor estará en nosotros. (1 Juan 4:10-12)

9 Así como el Padre me ama a mí, también yo los amo a ustedes. No se alejen de mi amor.10 Si obedecen todo lo que yo les he mandado, los amaré siempre, así como mi Padre me ama, porque yo lo obedezco en todo. (Juan 15:9-10)

21 "El que me obedece y hace lo que yo mando, demuestra que me ama de verdad. Al que me ame así, mi Padre lo amará, y yo también lo amaré y le mostraré cómo soy en realidad. (Juan 14:21)

lunes, 29 de septiembre de 2014

¿POR QUE NECESITO LA SANGRE?

LA HUMILDAD EN EL SERVICIO, 1 Co.10:31 “Hacedlo todo para la gloria de Dios.”

Siempre la Persona de Cristo nuestro Señor es el ejemplo a seguir, para nosotros como sus discípulos. Sin embargo muchas veces, descubrimos con dolor que nuestra motivación no es precisamente la de nuestro maestro.
Tres pensamientos que manifiestan la humildad del Dios todopoderoso al tomar forma humana:
1) La gran maravilla de la encarnación es que se desarrolla en la vida sencilla de un niño.
2) La gran maravilla de la transfiguración es que se humilla para descender al valle del endemoniado.
3) La gloria de la resurrección es que desciende para compartir con sus discípulos un desayuno en la playa.

Esto no es un anticlímax sino una gran revelación de Dios.

La tendencia es la de buscar lo maravilloso en nuestra experiencia. Confundimos el sentido de lo heroico con ser héroes.
Héroe es un protagonista o personaje importante.
Heroico es relativo a los héroes, lo que narra o cuenta hechos grandes y memorables.

Una cosa es pasar triunfalmente por una crisis, y otra muy distinta, es pasar todos los días glorificando a Dios cuando:
- no hay ningún testigo
- ninguna posición ilustre
- ninguno que nos preste la menor atención.

Si realmente eres devoto del Señor Jesús has llegado a la sublime altura donde nadie piensa en prestarte atención. Lo único que se nota es que el poder de Dios habita dentro tuyo todo el tiempo.
Necesitamos al Espíritu de Dios en nosotros para hacernos tan absoluta y humanamente suyos que pasemos del todo desapercibidos. Necesitamos del Espíritu Santo para hacer el trabajo más humilde y vil para la gloria de Dios.

La prueba de la vida de un santo no es el éxito humano sino la fidelidad en la vida tal como ella es realmente. Hacemos del éxito en la obra cristiana LA META y nos equivocamos.

Principio: La META ES MANIFESTAR LA GLORIA DE DIOS EN LA VIDA HUMANA, vivir la vida escondida con Cristo en Dios en las condiciones humanas.
Nuestras relaciones humanas son las condiciones verdaderas en las cuales la vida ideal de Dios debe ser exhibida.

Una vida cristiana victoriosa se logra paso a paso por el camino correcto. El cristiano redimido que transita por la senda de la obediencia, el compromiso, y la responsabilidad será la persona que Jesús usará para colaborar con El en la salvación del mundo.

Nadie puede edificar su propia empresa sobre el fundamento de Jesucristo. Sal. 127:1. La Iglesia de poder y victoria se compone personas transformadas, no solo de cristianos trabajadores. Recordemos la Iglesia de Efeso y la demanda de Dios Padre.
"Pero tengo contra ti que has dejado tu primer amor." Ap.2:4.
Así concluimos entonces que NO debemos poner el énfasis en la obras sino en EL SEÑOR DE LA OBRA.

Obediencia, compromiso y responsabilidad, no son en este siglo palabras que generen mucho entusiasmo especialmente entre los jóvenes. Sin embargo, nada puede hacer el Señor de la mies, si encuentra grandes dones y gente capacitada solamente. Estas tres palabras deben ser parte del carácter cristiano que ama a Dios. Amar a Dios es servirle. No en parte sino totalmente.
Así, solo los que han muerto con Cristo (Vea Gálatas 2:20) pueden vivir para servirle. Ellos ya no desean nada terrenal, sus ojos están puestos en las riquezas eternas. ¡Y hacia ellas avanzan con los ojos puestos en el maestro!

viernes, 19 de septiembre de 2014

EL PERDÓN QUE LIBERA.

• De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. – Colosenses 3:13.

Sucedió en Omaha Beach el 6 de junio de 1944: las fuerzas aliadas desembarcaron en las playas del Norte de Francia. Los 40 soldados del pontón PA 3-37 debían recorrer 500 metros al descubierto antes de llegar a un lugar seguro. En pocos minutos, 39 de ellos cayeron ametrallados por Fritz Wunderlick.

Sólo uno sobrevivió: el americano Stargell. A partir de ese momento la vida de Fritz se convirtió en una pesadilla. 58 años más tarde, aún perseguido por ese recuerdo, vio un documental sobre el Desembarco de Normandía. Quedó paralizado cuando vio al único sobreviviente testificar sobre la tragedia del pontón. Luego decidió ir a verlo. Cuando llegó, le dijo: «Soy Fritz Wunderlick. Tenía 17 años cuando abrí fuego contra los soldados del pontón PA 3-37, el 6 de junio de 1944. Hice este viaje para pedirle que me perdone por ese horrible acto que aún me persigue por las noches». Los dos hombres se abrazaron y lloraron: uno debido a los remordimientos y el otro debido a la alegría que le daba perdonar. Stargell pudo perdonar, porque después de aquel día había creído en Dios, quien lo liberó del odio y le ayudó a reconstruir su vida.

Todo hombre es enemigo de Dios, por ello necesita perdón, reconciliación. Dios lo ofrece a aquel que se arrepiente de sus faltas y cree que Jesús murió en la cruz para hacer posible ese perdón: "Siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo" (Romanos 5:10). Como el creyente conoce el perdón de Dios, está listo para perdonar a quien le hace daño. A menudo se trata de un procedimiento doloroso, pero la gracia de Dios cura el corazón y la mente.

LA ALEGRIA DE UNA VIDA SENCILLA

En una socie d ad ha m bri e nt a d e p os ee r co sa s, h oy y si e m p re – n o es fá c i l p ara e l crist i ano “est a r cont e...