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EL MINISTERIO DE LA INTERCESIÓN “Me parece a mí que ciertos cristianos tienen la habilidad especial de orar regularmente, durante largos períodos y obtienen respuestas frecuentes y específicas a sus oraciones, en mucho mayor grado de lo que se espera del cristiano promedio.” C. Peter Wagner
La biblia no se refiere al don de intercesión directamente. Como tampoco lo hace acerca de los ujieres, ministros de música, encargados del sonido, etc. Sin embargo, cada uno de estos ministerios es vital, en su momento, para el buen desempeño del cuerpo de Cristo.
Creo que podemos identificar a los intercesores dentro de los hermanos que tienen distintos dones de ayuda en el cuerpo de Cristo, como aparecen en Romanos capítulo 12. Claro, que debemos notar que los intercesores lo hacen en forma espiritual, adentrándose en “los lugares celestiales.”
Sin embargo, podemos encontrar un sin número de referencias indirectas al don de intercesión. Por ejemplo, Lucas 2:37, se refiere a Ana, una mujer viuda que servía a Dios en el templo haciendo ayuno y oración de noche y de día. Noten la frase “sirviendo de noche y de día con ayunos y oraciones.” Es una muy buena descripción de la actividad de una persona llamada a interceder.
También tenemos un tipo de don de intercesión en acción en el relato de Aarón y Hur, quienes sostuvieron las manos de Moisés, (mientras Moisés las mantenía levantadas Israel prevalecía en la batalla contra los amalecitas). Leer Ex. 17:2. Notemos que Aarón y Hur sirvieron de apoyo al levantar las manos de Moisés, pero no se apoderaron de la vara que sostenía, símbolo de autoridad.
Tampoco descendieron a pelear en la batalla físicamente ellos mismos como lo hizo Josué. Y esto es importante para comprender la fuerte connotación espiritual que tenía su ayuda a Moisés. Tanto que su intervención significó nada menos que una gran victoria para el pueblo de Dios.
A las personas que tienen el don de intercesión les encanta orar. Generalmente viven vidas fuera de lo común. Muchas veces hasta parecen reclusas. Su pasión por la presencia de Dios, es el propósito prioritario en sus vidas. Es más, es a ellos a quienes el Espíritu Santo les confía los planes eternos del Padre, para el presente de la iglesia. No sin antes haber derramado sus almas en lágrimas, súplicas y ayunos. Ellos llevan la carga del corazón del Padre por este mundo que se pierde. Tomando el ejemplo de una vida intercesora del modelo perfecto que Jesús nos enseñara con su propia vida. Vea Heb. 5:7.
Tal es el ejemplo que veíamos en la clase anterior, donde una intercesora en posición de guarda en favor de su hija espiritual, por indicación del Espíritu Santo, se recluyó “orando durante tres días seguidos, sin comer y casi sin dormir hasta que Dios le dio la confianza de que la oración había vencido.”
Nuestro gran ejemplo de ORACIÓN CONQUISTADORA, lo tenemos en Daniel. Como sabemos él se había dedicado a buscar al Señor por medio de ayuno y la oración, veamos Daniel 10:2 y 3:
2. En aquellos días yo Daniel estuve afligido por espacio de tres semanas.
3. No comí manjar delicado, in entró en mi boca carne ni vino, ni me ungí con ungüento, hasta que se cumplieron las tres semanas.
Se imaginarán que al cabo de tres semanas Daniel no tendría un aspecto muy agradable, pero a él no le importaba. Dios le había encargado una misión: ORAR PARA ENTENDER UNA VISIÓN.
La obediencia a una tarea asignada por Dios mismo, siempre tiene un alto costo.
Sus oraciones desataron una gran batalla en los lugares celestiales. Él tuvo que persistir. Sin persistencia no hay respuesta. Siempre que marchas en obediencia para seguir la visión que Dios te haya dado, la oposición será dura y persistente. PERO EL INTERCESOR DEBE APRENDER A SER AUN MÁS FUERTE Y PERSISTENTE QUE EL MISMO ENEMIGO. (Luc. 18:1-3).
Finalmente el ángel que Dios le envió pudo vencer. Veamos en Daniel 10: 12-14, esa descripción:
12. Entonces me dijo: Daniel, no temas; porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras; y a causa de tus palabras yo he venido.13. Más el príncipe del reino de Persia se me opuso durante veintiún días; pero he aquí Miguel, uno de los principales príncipes, vino para ayudarme, y quedé allí con los reyes de Persia.
14. He venido para hacerte saber lo que ha de venir a tu pueblo en los postreros días; porque la visión es para esos días.
El ángel que Dios le envía tenía una misión, HACERLE ENTENDER a Daniel la visión. Algo muy importante es que “a los que tienen el don de intercesión les es dado un tema específico de oración. Algunos orarán por un cierto ministerio o pastor. Porque su función es trabajar como “guarda de oración” de la persona que Dios les ha llamado a vigilar. Y esto es un gran privilegio.
“Los que tienen el don de intercesión pueden tener un único enfoque de oración durante toda sus vidas o no. Muchos intercesores son llamados a orar por todas las naciones. Una de este grupo es la hermana Freda Lindsay del Instituto Cristo for the Nations (Cristo para las naciones) ubicado en Dallas, Texas. Esta escuela bíblica tiene más de 1500 estudiantes y una gran organización misionera. Han ayudado a fundar alrededor de 8.700 iglesias en todo el mundo
